La tienda de cocinas Sabella en Valencia es un buen ejemplo de cómo utilizar de manera eficiente e inteligente los carriles de focos.
En Sabella son distribuidores oficiales de una de las marcas que mejor trabajan la arquitectura del espacio en la cocina, la marca alemana Letich y su showroom situado en la céntrica calle de Guillem de Castro, es un auténtico escaparate de estilo e innovación en el mobiliario de cocinas. Por ello, seleccionar la iluminación adecuada para este espacio era tan importante.
Nos decidimos por los carriles de Focos Tubo 55 ya que, tal y como ya explicamos en nuestra entrada dedicada a explicar la diferencia entre una regleta y un carril, en los carriles, los focos pueden desplazarse eligiendo la distancia entre los mismos en función del objeto que se desee iluminar.
En los carriles los focos pueden desplazarse eligiendo la distancia entre los mismos y en función del objeto que se desee iluminar.
En una tienda de cocinas como Sabella esta funcionalidad es imprescindible puesto que las cocinas expuestas varían en tamaños y diseños cada temporada y los elementos que se desea destacar con el haz de luz que proviene de los focos cambia de ubicación.
En los carriles de la tienda, además, los focos son orientables pudiéndose dirigir el haz en la dirección deseada (además de poder desplazar el foco a lo largo del carril). En este caso el color seleccionado ha sido el negro. Neutro y funcional. Si bien, fabricamos paperwritings.com este foco también en acabado en blanco, aluminio y dorado.
En el caso de una cocina de hogar, se puede optar por una regleta con focos fijos, tipo nuestra regleta minitube puesto que, si se ha realizado correctamente el estudio de las necesidades lumínicas, es muy probable que no sea necesario redirigir los focos. Podrás combinar además estos elementos con puntos individuales de luz adicional instalando focos individuales coordinando tu iluminación
Las cocinas son uno de los espacios estrella donde ubicar regletas y carriles, sin embargo, también resultan muy funcionales en salones, despachos y otras áreas de trabajo.
A la hora de seleccionar las luminarias necesarias para cada estancia de la sala es imprescindible tener en cuenta la cantidad de luz necesaria en las rutinas diarias, así como las tonalidades de la luz a emplear. En el caso de las cocinas, suele ser recomendable el uso de los tonos de 4000k y sus horas de uso intensivo se suele situar entre las 20:00 y las 22.00 horas. Sin embargo, cada casa es un mundo y merece la pena estudiar las costumbres de cada familia antes de diseñar el proyecto lumínico de un hogar.
En cualquier caso, lo que si es común a todos los hogares es que la cocina necesita una cantidad de luz generosa y sin sombras que se suele aportar con carriles, regletas, focos sueltos e incluso alguna lámpara si la cocina cuenta con mesa.
Y es que en la cocina es imprescindible tener en cuenta las diferentes zonas a cubrir. Una de ellas, como decíamos, es el comedor si éste se encuentra integrado. En este caso, si se desea, se puede seleccionar una lámpara colgante de fácil limpieza.
Otras zonas que se deben tener en cuenta a la hora de seleccionar las luminarias y su cantidad de luz son la zona del fregadero y las islas o penínsulas si las hubiese. La superficie de trabajo es otra zona que se debe considerar de manera independiente. Del mismo modo que es imprescindible tener en cuenta la iluminación de las zonas de almacenaje, armarios y cajones. Por supuesto la zona de la campana debe de estar iluminada de manera independiente. La diversidad de zonas y las necesidades específicas de cada una de ellas hacen que los focos, independientes o bien en regletas y carriles sean nuestros mejores aliado a la hora de planificar la iluminación de nuestra cocina.
